Poco a poco se ha acrecentado el gusto por el buen comer en México. La gastronomía mexicana ha llegado a pisar fuerte dentro y fuera del país; como aquellas sectas que poco a poco van adoptando creyentes, la cocina mexicana año con año da al mundo cocineros que la representan dignamente; y en ese movimiento cambiante día a día, "Oliva Premium" a llegado como anillo al dedo a los paladares mexicanos.
México, un país en donde su gente goza de un paladar peculiar; un paladar aclimatado a sabores intensos, notas que resaltan lo cítrico y lo picante, y en donde el "chile" es el protagonista principal en la mayoría de sus platillos. Un paladar rebelde, difícil de conquistar; y en estas galimatías, "Oliva Premium" ha llegado a México a adaptarse armoniosamente con la cocina mexicana. Su sabor con carácter logra resaltar los sabores caprichosos de la comida mexicana. Viene bien como toque final en una crema de frijol al chipotle, para emulsionar aderezos y servirlos en ensaladas de chapulines, gusanos de maguey o escamoles; inclusive su sabor resalta un tiradito de róbalo con limón, chile serrano y cilantro.
He cocinado con "Oliva Premium", y definitivamente, a diferencia de otros aceites, su presencia no abruma, más bien explota sabores. Por eso puedo decir sin reparo que "Oliva Premium" llegó para conquistar a México.
